Final "familiar" (Mundial sub20 de Colombia)

Se han cerrado las llamativas semifinales de la Copa del Mundo vigente en Colombia. Ya tenemos los dos candidatos al título mundial de los cuales sólo uno podrá ser el único paladín. Europa vs Sudamérica; representantes de ambos continentes se verán las caras en la final de este fin de semana.

La tanda de los penaltis: en el recuerdo

Quién se lo iba a decir a Portugal. Después de haber remontado aquella tanda de penales ante los argentinos en cuartos de final en la que tuvieron que afrontar un resultado adverso de 1-3 el cual terminó dándose la vuelta siendo el 5-4 el resultado final. Es decir, ahora podríamos estar hablando de una posible finalísima (con todo mi respeto hacia la selección de México) entre rivales eternamente opuestos como lo son Argentina y Brasil. Pero la suerte ha acompañado a los portugueses y hay que aceptarlo como tal. 

Hoy tocaba medirse ante la desconcertada Francia; una selección que sin ton ni son se plantaban en las 'semis' del torneo sin convencer a nadie. Smerecki, alineó un equipo idéntico al que decidió comandar en los cuartos ante Nigeria salvo el cambio de Faure por Fontaine.

El encuentro se desigualó demasiado pronto para los franceses después de que Danilo adelantara a los 7 minutos tras un buen cabezazo que el meta Ligali nada pudo hacer. Un "schock" inicial como este causó grandes dudas en el once galo. Por mediación de Fofana (una de las grandes figuras del torneo) Francia intentaba poner las tablas en el marcador. Pero sólo Clement Granier -jugador a seguir el mediocentro del Lyon- pudo poner en serio aprieto al arquero luso con un gran saque de falta el cual Mika pudo despejar.

Antes de llegar al descanso habitual, Portugal cuenta con la suerte de recibir un penalti (habría que contar cuántos penaltis se han lanzado ya) cuando solamente faltaban cinco minutos para el final de la primera parte. Nelson Oliveira ponía el punto y final con el tanto del 2-0 de una primera parte que condicionó extremadamente la segunda mitad.

No hubo mucho que ver tampoco en los cuarenta y cinco minutos que restaban de partido. Toda la línea ofensiva francesa totalmente desaparecida no tuvo capacidad de reacción a pesar de que el seleccionador decidiera buscar la respuesta internando a Alexander Lacazette -quien debería haber sido titular bien hoy bien ante Nigeria- y a Kakuta al campo. Pero no hubo ni suerte ni ganas. Nego tuvo la oportunidad más clamorosa en el 71´ después de recibir un balón incrustado en el larguero que no pudo remachar mandando el esférico fuera de la portería. Portugal se cuela en la final. Sólo faltaba el acompañante.

Volvió el fútbol

Después de ver el Francia-Portugal (confieso que el Clásico no me dejó ver demasiado), el otro partido que enfrentaba a Brasil y México presentaba un mejor nivel de fútbol. Superar la imagen del otro enfrentamiento no resultaba tarea complicada, desde luego a peor no podía ir.

Brasil partía como favorita (Danilo, Coutinho, Casemiro, Oscar, Henrique...) en un partido en el que México contaba con un porcentaje menor para poder ganar el duelo teniendo en cuenta calidad, físico y combinación.  Pero gracias a su actitud y confianza (factores imprescindibles también) trabajaron un partido que no pudo resolverse hasta el minuto 80. Minuto en el que Henrique anotaba el primero de los dos goles que encajaron los mejicanos. 

Antes, México pudo contener a Coutinho -desaparecido en toda la primera parte- y los balances de Oscar y Casemiro, junto con las subidas de Danilo, no fueron del todo fructíferas gracias a una labor de la Tricolor.  Fue un incesante toma y daca que los dos conjuntos ofrecieron. Los goles fueron lo único que faltaron para completar una magnífica primera mitad que perdió los minutos sin que nadie se diera cuenta. Teatro futbolístico puro.

Nota: Apuntar que "Cubo" Torres debió ser expulsado por sus acciones primerizas de auténtico novato dando manotazos a tutiplé constantemente a lo largo del primer cuarto de hora. Pero por ese motivo, por ser temprano, no fue debidamente expulsado del césped. 

Con algo menos de fútbol, el segundo periodo tomó la misma dirección que la primera. Un Coutinho que apareció más en escena -a veces se gustaba demasiado el joven jugador del Inter- activó la línea de ataque brasileira encontrando así la combinación entre los atacantes de la Carioca. Ninguno se decidió hasta que Henrique, el ariete, marcara el primer tanto de la eliminatoria tras una buena asistencia del recién incorporado Negueba (un recurso entre muchos de la Canarinha) para dejar vendido a la valiente y sangre-caliente selección de México. La Tri lo intentó con las internadas de Orrantia -gran partido el del extremo- y la picardía de Rivera pero sus sueños quedaron en eso, en sueños, después de que Henrique marcara un nuevo gol (el quinto del torneo creo recordar) que sentenciara finalmente el flagrante enfrentamiento.

Final entre familias culturales. Brasil clara favorita por su amplia red de recursos con la que cuenta tanto en el banco como en el habitual once titular, por su superioridad tanto en calidad individual como colectiva. Y en cuanto a Portugal, sólo le queda demostrar que la anticipada final España-Brasil es cosa de ilustres fanáticos.